Cuando la niñera se enamora Capitulo 9 - ¿Qué tal un día a partir de hoy?

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Jun-woo se despertó e inmediatamente se levantó de la cama. Jun-woo miró a su alrededor, se arrodilló y se inclinó mirando debajo de la cama. Como si buscara algo metió la mano y la movió luego se levantó de nuevo y sin dudarlo corrió a la habitación de Hyun-woo.

Guk-hee se dirigió a la habitación de Jun-woo antes de lo habitual. Según Tae-gun, Hyun-woo aún no había regresado a su habitación. Es decir, Hyun-woo no estaría cuando Jun-woo fuera a buscarlo después de despertarse.

En estos días cuando Jun-woo se despertaba iba al cuarto de Hyun-woo para mirar su sonrisa. Preocupado de que pudiera sorprenderse, Guk-hee se apresuró. Guk-hee estaba alisándose el cabello encerado frente a la habitación de Jun-woo pero salió volando al escuchar un grito que lo congelo.

Era Jun-woo nunca antes lo había escuchado gritar así. Guk-hee arrojó su chaqueta al pasillo al no poder ponérsela y abrió la puerta de Jun-woo. Tan pronto como entró se dio cuenta que Jun-woo no estaba. Un grito resonó de nuevo en la habitación de al lado, era la habitación de Hyun-woo.

Guk-hee voló como un rayo y abrió la puerta que comunicaba con la habitación de Hyun-woo como si estuviera a punto de romperla. Sin embargo no veía a Jun-woo por ninguna parte en la habitación de Hyun-woo. De prisa, llamó a Jun-woo como loco.

—¡Joven maestro! ¿Dónde está?

—¿Qué está pasando?

—¡Joven maestro!

Se escucharon las voces de Kang-wook y Tae-gun en la habitación de Jun-woo.

—¿Dónde está joven maestro? ¿Dónde? ¡Por favor responda!

Guk-hee no vio a Kang-wook ni a Tae-gun, quienes entraron deprisa mientras seguía llamando a Jun-woo.

—¿Jun-woo fue quien grito?

Pregunto Kang-wook en bata con agua goteando de su cabeza. Salió corriendo de la ducha y estaba descalzo sin pantuflas. Después de él entro Tae-gun, quien vive con ellos en la mansión, se quedó allí de pie vistiendo una camisa cerrada.

—No puedo encontrar al joven maestro.

Guk-hee volvió a mirar a Kang-wook, tratando de recuperar el sentido.

—¿Qué quieres decir? ¿No dormiste con él anoche?

—Oh, no. Me quedé con él hasta las doce de la noche, luego volví a mi habitación, dejándolo bien dormido. Vine a verlo en la madrugada y seguía tranquilamente dormido presidente.

Tae-gun miró desconcertado a Guk-hee y luego se giró hacia Kang-wook.

—Entonces, ¿de dónde viene el grito...?

En ese momento escucho un chirrido de algún lugar. Kang-wook se detuvo rápidamente y se calló. Unos brazos regordetes salieron de debajo de la cama de Hyun-woo y Jun-woo se arrastró fuera. Jun-woo, que tenía la mitad de la cara cubierta con su cabello desordenado, señaló con urgencia debajo de la cama con las manos y miró a Kang-wook.

—Me desperté Jun-woo soñó que hermano desaparecía debajo de la cama vine a buscar a mi hermano. No lo encuentro.

Jun-woo habló rápidamente y lloró mirando al techo. Todos supieron de inmediato a quién buscaba Jun-woo mientras gritaba. Todos sabían muy bien dónde estaba él ahora, a quien seguía buscando Jun-woo, pero nadie podía decírselo.

Guk-hee lo sostuvo mirando resentido al presidente recordando lo que dijo —Lo enviaré de vuelta al amanecer— Sentí que mi corazón se iba a romper por el llanto de Jun-woo que miraba al techo.

—Ven aquí.

Jun-woo, quien seguía mirando debajo de la cama de Hyun-woo con una mirada llena de pesar, fue sostenido en los brazos de Kang Wook.

—Jun-woo no lo ve.

—Deja de llorar. Papá sabe dónde está.

—¿Jinda? ¿No se fue mi hermano?

—No se fue. La niñera seo volverá mientras te lavas los dientes con el secretario Chen.

—¿Jun-woo va a ir con mi hermano?

'No puede, Joven maestro. Te sorprenderás si vas. Sólo ven conmigo.

Tae-gun y Guk-hee pensaron lo mismo. Sin embargo, Jun-wook, quien no tenía forma de saberlo, miró a Kang-wook con lágrimas en los ojos e hizo un puchero. Kang-wook secó las lágrimas de su hijo y recordó a Hyun-woo durmiendo en su cama.

Desde el principio, Kang-wook no tenía pensado enviar de regreso Hyun-woo al amanecer, pero se sorprendió por la reacción de Jun-woo más que los otros dos. Se sentía molesto porque no podía pensar con tranquilidad. Jun-woo estaba más encariñado de lo que pensaba de Hyun-woo. Esto no era parte de su plan.  

—Estará aquí pronto. Lo prometo.

—¿Jinda?

—Lo prometo.

—sí

Cuando Jun-woo asintió de mala gana, Kang-wook miró a Guk-hee este rápidamente agarró a Jun-woo y suavemente secó sus lágrimas con el dobladillo de su camisa.

—Joven maestro, vamos a buscar su cepillo de dientes.

—Voy a hacerlo ahora.

—Sí, sí. Lo haremos ahora, joven maestro.

Cuando Guk-hee se fue a la otra habitación con Jun-woo, Kang-wook revolvió su cabello mojado y murmuró en voz baja.

—Esto no presagia nada bueno.

—¿Qué?

—Nunca lo había escuchado gritar así. ¿Tiene sentido que Jun-woo se ponga así solo porque la niñera se fue?

—No... No lo tiene.

Tae-gun negó recordando a las niñeras que Jun-woo había despedido.

—¿Por qué diablos le gusta tanto?

Creo que padre e hijo tienen el mismo gusto.

Tae-gun estaba aún más asombrado que Kang-wook, quien siempre veía a través de las personas con solo mirarlas a los ojos, no supiera la razón.

—Quédate aquí con Jun-woo ya que seguirá sorprendido.

—Sí, señor.

Kang-wook se mostró reacio, pero fue a su habitación a despertar a Hyun-woo.

★★★

Quería acostarme de lado porque me duele la cabeza, pero Hyun-woo frunció el ceño porque no podía mover un solo dedo. Ni siquiera podía mover las piernas porque le punzaba cierto lugar de su cuerpo que no podía contarle a nadie. Aunque en mi cabeza sabía que tenía que levantarme, me costaba abrir los ojos era como si me los hubieran cocido.

Cuando pude darme la vuelta algo frío me tocó la frente. Era como si en la habitación sin ventilación hubiera entrado aire fresco, Hyun-woo se sintió más cómodo y su mente se volvió más clara. Quería sentir el frío por todo el rostro, así que giró la cabeza y frotó su mejilla.

—...solo despierta. Si no te levantas ahora estarás en problemas Seo Hyun-woo.

—Que...

Los eventos de anoche pasaron como un relámpago en mi cabeza cuando dijo mi nombre. Entonces, también el recuerdo volvió a todo mi cuerpo. Crujía y palpitaba por todas partes con dolor. Hyun-woo abrió los ojos y miró a Kang wook, quien lo miraba de pie a su lado con su gran mano sobre su rostro.

—Despierta. Jun-woo te está buscando.

—Jun... ¡Claro, Jun-woo!

Hyun-woo no podía creerlo se había olvidado de Jun-woo no se dio cuenta de que se había quedado dormido en la cama de Kang-wook. Entonces Kang-wook lo besó suavemente y él abrió mucho los ojos y no pudo decir nada.

—Toma un descanso durante las clases de Jun-woo ya que te sentirás cansado e incómodo.

Hyun-woo cuyo rostro se puso rojo por sus palabras se levantó empujando a Kang-wook.

—Oye, no me trates como a una mujer.

—¿Una mujer? Ninguna mujer se ha despertado jamás en esta cama. Por supuesto tampoco ningún hombre.

Que le haya dicho que jamás nadie se ha quedado a dormir en su habitación sonó para él como si fuera especial, Hyun-woo se sintió acalorado y emocionado a pesar de que estaba avergonzado. Sin embargo lo que sucedió en esta cama se estaba reproduciendo en su cabeza así que no pude mirar a Kang-wook en absoluto.

—Oh, dame algo de ropa.

La ropa que me quito estaba a los pies de Kang-wook así que no podía alcanzarla. Sin embargo, Hyun-woo no podía levantarse de la cama así desnudo. Bajó la cabeza hasta las rodillas y solo extendió las manos.

—Si te sigues comportando tan tímido romperé la promesa que le hice a Jun-woo.

—¿Jun-woo ya se despertó?

Hyun-woo levantó la cabeza y miró a su alrededor. No había un reloj en la espaciosa habitación. Hyun-woo envolvió la sábana alrededor de su cintura a toda prisa. Entonces escuché su risa y me arrojo mi ropa.

—Detente porque te ves ridículo. Vi cada rincón de ti anoche cada grieta de tu cuerpo, así que ¿cuál es la diferencia?

—Oye, por favor deja de hablar.

Hyun-woo quería taparse los oídos pero primero tenía que ponerse la ropa porque tenía prisa. Se puso de pie y se subió los pantalones soportando el dolor sordo que sentía debajo de la cintura, pero sus piernas se tambalearon y se derrumbó en los brazos de Kang-wook. Se sorprendió cuando una excitante sensación pasó por su cuerpo Hyun-woo agarró el brazo de Kang-wook.

—Suéltame.

—Te soltaré.

—En este momento.

—Eres el primer hombre que dejo que me ordene, si no fuera porque te busca Jun-woo no te dejaría salir de la habitación en este momento.

Kang-wook tiró de Hyun-woo con fuerza y ​​le susurró al oído.

—Oye ¿qué quieres decir con que no me dejaras salir? Fue solo una vez.

—¿Qué? ¿Tener sexo? Eso es algo que descubrirás más tarde, así que hoy descansa bien.

Kang Wook chupó sus labios rojos, que están más rojos por lo de ayer y dejó ir a Hyun-woo con una expresión triste. Kang-wook se dio cuenta de que su sabor era algo peligroso. Quería mantener a Hyun Woo cerca de él, quería verlo hablar o solo respirar.

Kang-wook aún no sabía si era un problema que Jun-woo lo quisiera tanto como para soñar con él. O si era su pasión la que no parecía calmar tan fácilmente.

—Hoy tengo mucho trabajo. Maldita sea, ha pasado un tiempo desde que no quería ir a trabajar.

Kang Wook murmuró y se dirigió al vestidor para cambiarse.

★★★

Jun-woo estuvo mirando Hyun-woo durante sus clases. Así que Hyun-woo no pudo salir de la sala de estudio a pesar de que quería descansar por un rato. Tan pronto como Jun-woo vio llegar a Hyun-woo se pegó a él tomó su mano y no la soltó. Al no haber encontrado a Hyun-woo en su cama como en su sueño Jun-woo se sorprendió mucho.

Hyun-woo saludó a Jun-woo. Luego movió los dedos, él quería que se acercara. Sin embargo, Hyun-woo no podía acercarse ya que el profesor de inglés le estaba leyendo un cuento de hadas con diligencia.

—El joven maestro hoy no está concentrando. ¿Deberíamos terminar por hoy la clase?

—¿Qué? ¿Por qué me pregunta...?

El mayordomo Kim lo atrapó saliendo de la habitación de Kang wook. Estrictamente hablando, en lugar de ser atrapado, era correcto decir que el mayordomo estaba afuera. Hyun-woo se sorprendió no podía caminar correctamente así que recibió su ayuda cuando su rodilla se dobló en medio del pasillo. No puedo olvidar como me miro el mayordomo Kim. El lo miro fijamente en ese momento.

La primera vez siempre es dolorosa.

Definitivamente estaba pensando eso. A parte por alguna razón, los guardaespaldas cuando miraron  a Hyun-woo apartaban de inmediato la mirada y se inclinaban. Todos parecían saber lo que había pasado entre él y Kang-wook. Por lo tanto, no era de extrañar que Guk-hee de repente lo mirara y pidiera su opinión.

—Si la niñera Seo da el permiso le diré a Blaine que pare por hoy.

Hyun-woo no pudo soportarlo más se inclinó y le susurró a Guk-hee.

—En serio, ¿qué te pasa? Realmente no eres esa clase de persona.

—¿Qué clase de persona crees que soy?

Guk-hee sabía muy bien lo que piensa Hyun-woo pero no podía consolarlo. Se sintió culpable y se levantó sigilosamente.

—La merienda de hoy es pastel de mango. Es el pastel favorito del joven maestro, así que lo mejor será que comamos temprano.

Al ver a Guk-hee acercarse a Blaine el instructor de inglés, Hyun-woo se dio cuenta de que todas las personas en esta casa eran iguales. Excepto Jun-woo. Cuando Guk-hee hablaba con Blaine, Jun-woo corrió y se sentó en el regazo de Hyun-woo en lugar de en su silla.

—...bien.

—¿Qué te pasa hermano?

Cuando el peso de Jun-woo aplasto su trasero ese lugar le palpitó y Hyun-woo gimió sin notarlo, mordiéndose el labio. Jun-woo se preguntó por qué Hyun-woo estaba extraño inclinó la cabeza y lo miró fijamente.

—Oh, no. Jun-woo, ¿no fue divertido el cuento de hadas?

—No, es divertido. Voy a jugar con mi hermano.

Jun-woo, que de repente se levantó, le susurró al oído a Hyun-woo. La respiración del niño le hizo cosquillas en el oído, Hyun-woo se echó a reír.

—Hermano, ¿vas a hacer Taeyeon hoy?

Entonces recordé que el uniforme llegaría por la mañana. Me era difícil incluso estar de pie así que pensé que sería demasiado doloroso darle la clase de Taekwondo. Pero  al ver los ojos expectantes de Jun-woo, no pude posponerlo para mañana. Hyun-woo asintió pensando que solo le mostraría un movimiento simple, no uno de alto nivel.

—Por supuesto. Primero comamos algunos bocadillos y después te enseñare Taekwondo.

Tenía mucho en que pensar sobre cómo lidiar con el problema con Kang Wook y si debía o no dejar de trabajar debido a esto como la niñera de Jun-woo. Pero lo que fue más impactante que eso era que algo grande estaba sucediendo dentro de mí desde anoche.

Hyun-woo que no podía ignorar sus sentimientos temía y esperaba. Sentí que estaba perdiendo la cabeza. En momentos así lo que me tranquilizaría seria tirar todo para después encerrarme en mi habitación y dormir pero mirando a Jun-woo no podía.

Hyun-woo estaba muy apenado con Jun-woo, porque parecía que se le olvidó por completo su trabajo. Acarició el cabello suave de Jun-woo y se dirigió a la sala de juegos para ver su uniforme de Taekwondo.

—Hermano, Hee-ing, Doggy quieren usar ropa de Tae-gon.

—¿En serio? Entonces aprenderé y se las haré. Dame un poco de tiempo.

No creo que le haya entendido por que tenía que esperar, pero Jun-woo sonrió y asintió ante la idea de que iba a usar un uniforme de taekwondo.

—¿Cómo puedes sonreír tan bonito?

Mirando a Jun-woo que sonreía tan lindo, pensé que estaba disfrutando mucho en trabajar aquí pero tuve miedo cuando recordé lo que pasó anoche. Jun-woo sacó el uniforme de Taekwondo.

Sacudió la cabeza al ver lo importante que era para él y Hyun-woo no pudo responder. Tenía que hacer una simple demostración de Taekwondo, así que apartó sus pensamientos y se puso el uniforme sintiendo el cuerpo rígido.

—Este es el cinturón de Taekwondo. Cuando inicias comienzas con un cinturón blanco y cambia de color como amarillo, rosa, verde y azul cuando subes de categoría.

El uniforme le quedaba perfecto a Jun-woo, ni demasiado grande ni demasiado pequeño. Se veía tan lindo que Hyun-woo olvido el dolor que sentía por todo el cuerpo. Le  entrego a Jun-woo un cinturón blanco y le explicó cómo atarlo lo más fácilmente posible.

—¿Por qué mi hermano es negro?

—El negro es el color que usan aquellos que han dominado todos los movimientos de Taekwondo.

Jun-woo miró el cinturón de Guk-hee y el de Hyun-woo con los ojos muy abiertos. Luego asintió ya que había entendido.

—El secretario Chen y Jun-woo somos blancos. El hermano mayor es negro, ¿entonces por eso es negro, Machi?

Dijo con una expresión refrescante que  finalmente entendió, Jun-woo frunció los labios.

—No sé por qué tengo un cinturón blanco joven maestro. No soy un novato.

dijo Guk-hee serio y envió una mirada de protesta a Hyun-woo.

—El secretario Chen es experto en judo. Pero es la primera vez que practicaras Taekwondo por eso tienes el mismo color de cinturón que Jun-woo. Entonces ven aquí y párate a su lado.

Un lado de la sala de juegos ya estaba cubierto con cojinetes de protección como si fuera un dojo. Le dijeron que apenas convertirían una habitación de invitados en el primer piso en un dojo, así que tendrían que entrenar por el momento aquí.

Hyun-woo, reacio en renunciar ya que tendría un dojo en casa, se lavó el cerebro diciendo que ayer fue la única vez que se acostaría con Kang Wook. Para proteger su trabajo y poder seguir siendo la niñera de Jun-woo, nunca más tenía que caer en la tentación.

—Es realmente injusto.

Guk-hee, que tiene confianza en su físico, siguió quejándose, pero cuando Jun-woo lo fulminó con la mirada, cerró la boca y se paró al lado de él.

—Solo hazlo. El secretario Chen también es blanco.

—Sí, señor.

Hyun-woo se sorprendió al escuchar a Jun-woo, que habló firme, al igual que su padre Kang-wook.

—Bueno como hoy es tu primera clase te enseñare a cómo prepararte. Primero la etiqueta en el Taekwondo…

—Espera nos gustaría primero ver una pequeña demostración de la niñera seo, ¿no es así, Joven maestro? ¿No quiere ver sus movimientos de Taekwondo primero?

—Quiero verlos.

La mirada de Jun-woo se iluminó y no pudo ocultar su emoción al querer ver a Hyun-woo placticando. Jun-woo, quien siempre vestía formal, estaba descalzo vistiendo el uniforme de  Taekwondo entrelazando sus manos regordetas.

Hyun-woo tenía un corazón débil y no pudo ignorar la apariencia de Jun-woo, pensó que debía mostrarle el alcance de sus patadas en el aire incluso si su cuerpo se desgarraba. Sin embargo, Hyun-woo, cuando empezó a estirar ambas piernas para calentar gimió sin notarlo. Sintió dolor como si le estuvieran golpeando en los moretones.

—¿Qué te sucede? Ok, está bien, abuelo Seo. Veamos tu demostración la próxima vez.

Guk-hee había olvidado que Hyun-woo se encontraba adolorido por la emoción, y agitó la mano desconcertado.

—¿Por qué? No quiero. Quiero verlo ahora.

Jun-woo miró a Guk-hee  y este no podía creerlo. Abrió mucho sus ojos negros como si estuvieran a punto de llorar.

—Joven maestro, es que. La niñera...

—Dijo que lo haría. ¿Qué te pasa secretario Chen?

Dijo que iba a hacer la demostración, pero Guk-hee lo detuvo. Jun-woo sacudió su cuerpo y lo fulminó con la mirada.

—No, no es eso. Joven maestro...

Era la primera vez que Jun-woo se mostraba tan terco y obstinado, por lo que Guk-hee  no sabía qué hacer y solo miro a Hyun-woo. De hecho, antes de que Kang-wook se fuera a trabajar, le había ordenado que dejara descansa a Hyun-woo. Sin embargo, Hyun-woo no se veía incómodo en absoluto, por lo que Guk-hee se le olvido por completo.

—Estoy bien, secretario Chen. En serio... solo bebí un poco anoche.

No tenía excusa, pero cuando por culpa de Guk-hee recordó lo de anoche. “Pase la noche con Kang-wook”, Hyun-woo no supo que hacer.

—No, el presidente también lo pidió. No fui muy sensato. Joven maestro aprendamos Taekwondo la próxima vez.

Jun-woo, que estaba mirando los labios de Guk-hee, de repente los detuvo con el dedo.

—¡Secretaria Chen, shh!

Era la voluntad de Jun-woo. Él quería ver la demostración de Taekwondo de Hyun-woo sin importar nada. Hyun-woo rápidamente apretó los puños e hizo los movimientos básicos porque pensó que Jun-woo lloraría si se demoraba más.

—Está bien, comencemos ahora. En primer lugar, solo te mostraré el ejemplo de una patada en el aire. ¿Estás listo para verlo?

—Sí

—Oh sí.

Al mirar a Jun-woo gritar vigorosamente, Hyun-woo sacó toda la energía escondida en su cuerpo. Al  practicar Taekwondo me había lesionado varias veces pero ahora estaba avergonzado por que tuve que apretar los dientes para evitar gemir por el dolor que sentía en el trasero.

Hyun-woo cambió de opinión así que no solo le mostró una patada en el aire si no realizó movimientos de alto nivel uno tras otro. Cuando Hyun-woo levantó la pierna a 180 grados y pateó el suelo para mostrar un movimiento lateral, Jun-woo y Guk-hee  aplaudieron y vitorearon.

—¡Guau! Jinta es bueno.

—Es verdad. Después de todo el presidente tiene muy buen gusto.

Hyun-woo detuvo el pie frente a los ojos de Guk-hee cuando dijo —tiene buen gusto.

—¡Argh!

Guk-hee se congeló mientras aplaudía y miró a Hyun-woo con la cara azul. Jun-woo se tapó la boca con la mano para detener el estallido de vítores. Parecía un espectáculo, como si fuera a golpearlo.

—Si pones tu pie justo en frente de la cara de una persona de esta manera, estarás en problemas. ¿Entiendes?

Guk-hee, que vio los agudos ojos de un profesional en el hermoso y gentil rostro de Hyun-woo, tragó saliva seca y asintió.

—....Sí Sí.

—Por favor, llámame Maestro durante la clase de Taekwondo.

—Si Maestro.

—Wow, Maestro, eres tú.

Jun-woo inclino la cabeza y le hizo la seña del corazón con los dedos que Hyun-woo le había enseñado hace unos días. Al notar que no era el gentil Hyun-woo quien estaba allí  Guk-hee se susto. Hyun-woo, que sentía como se desgarraba con cada movimiento excesivo que hacia solo sollozo. 

Después de eso, Jun-woo, aprendió los movimientos con la demostración de Hyun-woo. Practico los movimientos de taekwondo por 30 minutos, sin decir que era difícil. Aunque lo difícil fue  lograr que se detuviera más tarde. Los tres abandonaron felizmente la sala de juegos y se dirigieron al baño.

Hyun-woo que había sobre exigido a su dolorido cuerpo haciendo patadas excesivas ya quería sentarse. Porque sentía que si no se sentaba gatearía. Hyun-woo se alegró mucho cuando Jun-woo dijo que quería beber jugo, y casi lloró cuando dijo que quería tomarlo en la sala de descanso.

Lo sentó en silencio en el sofá pero justo cuando estaba a punto de sentar su adolorido trasero en el sofá, el mayordomo Kim entró con un amable gesto.

—Niñera Seo, el presidente está al teléfono.

Hyun-woo, que apenas logro sentarse en el sofá, miró asustado el teléfono celular que le dio el mayordomo Kim. En ese momento, sin saber por qué Hyun-woo miro a Guk-hee.

Este entendió de inmediato y giró levemente el sillón donde estaba sentado Jun-woo, Hyun-woo tragó saliva seca y tomó el teléfono. Cuando lo puse en mi oído, escuché la voz baja de Kang-wook, antes de poder decir 'hola'

—¿Cómo te sientes?

Tan pronto como escuchó su voz, Hyun-woo saltó de su asiento al recordar el cosquilleo que sintió por su aliento cuando le susurró al oído la noche anterior. Mi desconcertado corazón comenzó a latir con fuerza, y luego, mi rostro se calentó.

—Te pregunté si estás bien.

—Estoy bien, estoy bien.

—¿En serio? Es un alivio. ¿Qué están haciendo?

— Jun-woo quiso beber jugo después de la clase de Taekwondo, así que vinimos a la sala de descanso.

—¿Clase de Taekwondo? ¿Estás bien?

—Si no fue difícil— la voz de Kang Wook se elevó un poco como si fuera un problema.

—Te dije que estoy bien.

Hyun-woo no podía seguir el ritmo de Kang-wook ya que se comportaba diferente durante la noche. Un día discutió con Ji-seok sobre si el cuerpo le gana incondicionalmente a la mente, y después de eso no nos hablamos durante dos días. Sin embargo, Hyun-woo no sabía porque sentía su presencia al escuchar su voz o su respiración después de dormir una noche.  

—¿No puedes dejar de hablar bajo?

—... Solo hablo como de costumbre.

Hyun-woo, por lo general no recuerda cómo habla Kang wook por lo que solo pudo decir eso.

—Por cierto, cenaré en casa. Vamos a comer juntos. Ya ordene que cancelen todas las clases de la tarde, así que descansa un poco.

Terminó la llamada y Hyun-woo miró fijamente el teléfono celular, tratando de organizar lo que acababa de decir Kang Wook. Jamás había visto a Kang-wook cenar en la mansión pero lo más extraño fue que le haya informado. Mientras miraba el teléfono sin decir nada, el mayordomo Kim tomó suavemente el teléfono de la mano de Hyun-woo.

—¿No dijo nada, niñera Seo?

—Ah... viene a cenar, por la noche...

—Ya veo. Tendré que prestar especial atención a la cena de esta noche. Por favor descanse.

Cuando el mayordomo Kim se fue, Guk-hee, que había estado observando a Hyun-woo hasta ese momento, volvió a colocar el sillón donde estaba sentado Jun-woo en su lugar.

Cuando Jun-woo vio a Hyeon woo le dio su vaso de jugo a Guk-hee y se levantó.

—Hermano, Jun-woo, libro doggy 2 dame eso.

—¿Eh? Uh... Sí. Te lo leeré

Mi corazón comenzó a latir como loco cuando dijo que cenaríamos juntos. Como no se calmaba Hyun-woo exhaló con fuerza.

—Hermano, el viento sale de tu nariz.

Como si fuera divertido Jun-woo levantó los hombros y se rio. Hace unos días, con el permiso de la Sra. Choi. Un empleado de una tienda departamental de ropa infantil trajo ropa informal que parecía haber sido aprobada por la Sra. Choi.

Ahora vestía unos pantalones cortos con bandas elásticas de color como si fuera un uniforme de marinero. Con solo mirar lo bien que le queda a Jun-woo alivio su fatiga. Su corazón se fue calmando gradualmente.

—Mira, secretario Chen. Singh, está haciendo así.

Jun-woo señaló mi nariz e hizo una expresión graciosa de cómo me moría.

—Lo veo Joven maestro, el viento que sale de la nariz de la niñera hará volar el techo.

—No es verdad Jun-woo, ¿vamos a la biblioteca?

Miró brevemente Guk-hee pero le agradaba más Hyun-woo así que le dio la mano.

—Hermano, vamos a estudiar. Jun-woo aprenderá coreano. Leeré doggy 2

Cuando llegaron los libros de cuentos de hadas y los pusieron en la biblioteca. Jun-woo quería leerlos el solo y mostró un gran interés en los caracteres Hangeul, que había estado aprendiendo durante un tiempo.

El problema era que está tratando de aprender también a escribir dejando de lado aprender primero las vocales y las consonantes. Guk-hee insistía que debía aprender lo básico, pero Hyun-woo, insistía en que debía aprender las letras primero. Así que siempre chocaban.

—Entonces vayamos a la sala de estudio.

—Hoy vamos a empezar con las consonantes.

—Puede simplemente aprender las letras primero.

—No, no puede.

—Puede funcionar.

—Ah... me duelen los oídos.

El suspiro de Jun-woo se escuchó entre los dos que estaban discutiendo sin ceder a la opinión del otro.

★★★

Jun-woo, que está sentado en su silla para bebés, tiró del brazo de Hyun-woo. Girando la cabeza, Jun-woo señaló el interfono  en la entrada del comedor. El mayordomo Kim estaba hablando por teléfono con alguien.

—¿Papá está aquí ahora?

Dijo en voz baja, asintió e inclino la cabeza ligeramente hacia un lado. Quería preguntar por qué asintió pero Hyun-woo no tuvo más remedio que reírse. Cuando escuché que Kang-wook ya había llegado mi boca instintivamente se puso seca.

Hyun-woo se sintió aliviado al pensar que ya era tarde. Kang-wook llegó tarde y ya había pasado la hora de la cena. Jun-woo que está de buen humor pregunto:

—¿Por qué papá es tan lento?

Tarareando una canción infantil que Hyun-woo le había enseñado. A Hyun-woo le gusto el cambio en Jun-woo,  quien cambiaba día a día y era incluso asombroso. Podría haber vivido los días más felices en su vida si no fuera por Kang Wook, pero seguía pensando en él y Hyun-woo se sintió apenado con Jun-woo.

—Está aquí.

—¿Qué?

—Mira, todos están aquí. Mi papá ya está aquí.

Ahora veo, no solo el personal del comedor sino también Guk-hee salieron al pasillo para recibir a Kang wook. Después de un rato, se escucharon voces de aquí y allá saludando, —Ha llegado presidente, junto con el sonido de pasos caminando por el pasillo. Hyun-woo no podía seguir sentado, así que rápidamente se levantó de su asiento y miró al frente. Al contrario pensé que debía mirar hacia el pasillo con la cabeza inclinada.

Pero cuando Jun-woo dijo 'papá' feliz, miró hacia la entrada sin darse cuenta. Kang Wook vestido con un traje azul marino oscuro y una corbata gris apareció frente a él. En ese momento, Hyun-woo sintió como si lo hubieran golpeado por todo el cuerpo con un enorme martillo. Hyun-woo descubrió más tarde que era la atmósfera abrumadora que provenía de Kang wook.

Le temblaban las piernas, por lo que Hyun-woo se agarró del respaldo de la silla de Jun-woo. Rápidamente retiró su mano por temor a que alguien pudiera notarlo pero no pudo evitar la aguda mirada de Kang-wook. Sus ojos se volvieron salvajes y sus labios se movieron atractivamente.

—¿Qué te ocurre? ¿No tienes fuerza en las piernas?

Kang-wook preguntó en un tono bajo mientras se quitaba la chaqueta. Su mirada decía:

¿Por qué, no tienes la fuerza para estar de pie? y Espero que sea por mí.

Su mirada continuó enviando preguntas calientes. Hyun-woo trató de evitar su mirada y habló rígido.

—No, mis piernas son fuertes. Solo se atoro mi pie.

—Digamos que eso pasó, así que siéntate. Jun-woo, ¿te divertiste hoy?

Le sonrió a Jun-woo como si su emoción se hubiera roto.

—Sí, papá. Incluso Jun-woo hizo tawo.

Jun-woo mostró los movimientos más básicos con las manos mientras hablaba.

—Mientras te diviertas.

—Sí, es divertido.

—¿Por qué no te sientas?

Hyun-woo, esperó hasta que Kang-wook se sentara después se sentó en silencio ante la indicación. Por la tarde solo estudió coreano mientras jugaba con Jun-woo por lo que su cuerpo se recuperó un poco.

—Preparen la cena.

Tan pronto como Kang-wook lo indicó sirvieron la cena. Al principio Hyun-woo solo miraba sin importancia a la comida que servían pero en poco tiempo sus ojos se hicieron más y más grandes. Abrió la boca con los ojos fijos en las bandejas de comida que traían.

Toda la comida que habían servido era justo lo que le gustaba. Por supuesto, algunos platillos fueron hechos para que Jun-woo los pudiera comer pero la mayoría de ellos eran sus platillos favoritos. Finalmente, mientras colocaban su guiso favorito de panceta de cerdo y kimchi sobre la mesa, miró a Kang-wook recostado cómodamente en la silla.

—¿Oh! qué pasa?

—Quiero desnudarte.

Hyun-woo cuyo rostro se sonrojó al ver su cuerpo sacudió la cabeza y lo miró de nuevo.

—No es eso. ¿Cómo supiste?

—¿Qué? ¿La comida?

—Sí, toda esta comida es mi favorita. No puedo creerlo, hay tofu estofado, rábano en escabeche, y me encanta tanto el guiso de kimchi hecho con panceta de cerdo que puedo llorar.

Mientras escuchaba la historia de Hyun-woo, Kang-wook sonrió ya que no entendía a que se refería y dijo:

—¿Qué te pasa? Nadie aquí odia el estofado de kimchi ¿verdad?

—No. Presidente. Suelo comerlo todos los días.

Tae-gun dijo seriamente mientras se subía las gafas.

—El estofado de kimchi sabe mejor con panceta de cerdo, presidente

—Podría comerlo todos los días.

Siguiendo las palabras de Yoon-taek, Man-jun dijo.

—Usted come estofado de kimchi y también kimchi. ¿Verdad, joven maestro?

—Sí, Secretario Chen.

—¿Escuchaste eso? A todos les gusta el estofado. Vez quieren comer estofado de kimchi con panceta de cerdo todos los días. Al igual que tú.

—Huh-oh

Un extraño sonido se escapó de la boca de Hyun-woo ante sus últimas palabras, que murmuró con indiferencia como si sus labios no se movieran. Hyun-woo miró fijamente el estofado de kimchi humeante oliendo a picante por su expresión explícita. Probablemente soy la única persona que se sonroja con el estofado de kimchi. Cuando escuchó su risa baja y sexy del otro lado, Hyun-woo miró a Kang-wook.

—No pienses demasiado y solo come. Ustedes también vayan a cenar.

Solo se quedaron ellos tres cuando el grupo Tae-gun salió del comedor para comer en la otra habitación.

—Gracias por la comida.

Hyun-woo estaba junto a Jun-woo, así que no podía responderle y solo tomó la cuchara. Entonces, Kang-wook lo miró insatisfecho.

—¿Qué, No dirás nada? ¿No reaccionaras a lo que acabo de decir?

—¿De qué estás hablando?

—Acabo de decir que quiero comer.

Lo dijo en forma para que Jun-woo no lo entendiera. No pareció gustarle que Hyun-woo no haya reaccionado a pesar de que dijo que quería comérselo. Hyun-woo se sorprendió y pensó: —¿Qué debo decir para que se sienta mejor?—. Era consciente de Kang wook en todo momento.

El cuerpo no puede vencer a la mente.

Estaba orgulloso de escuchar lo que estaba diciendo,  Hyun-woo se apresuró a poner una servilleta debajo de la barbilla de Jun-woo, y era difícil que su rostro enrojecido volviera a la normalidad.

—Hermano, tú también debes comer. Te gusta todo.

Jun-woo agarró el brazo de Hyun-woo y lo sacudió quizás porque pensó que se había enojado con su padre y no quería comer. No tuvo más remedio que mirar a Kang wook recordando lo que dijo sin poder hacer nada. Luego sonrió y dijo: —Está bueno— Y cogió la cuchara.

—Mira, te gusta, ¿verdad?

—Jaja... Eso, sí. Gracias, Jun-woo. ¿Te gustaría un poco de kimchi?

—Sí, el pincho aquí también.

Por ahora, lo primero era que Juwoo comiera, por lo que Hyun-woo fingió no notar la mirada de Kang-wook. A diferencia de mi estofado picante de kimchi, el cocido al vapor de costillas de cerdo envueltas en kimchi se preparó para que fuera fácil de comer. Hyun-woo puso el kimchi enrollado al vapor en el plato frente a Jun-woo.

—Sóplalo y come.

—Jun-woo puede comer solo. Tú come.

Hyun-woo miró el guiso de kimchi después de ver a Jun-woo llevarse la carne a la boca. No quería ver a Kang-wook ya no quería cenar junto a él. El repentino cambio de comportamiento de Kang-wook fue tanto aterrador como emocionante, por lo que Hyun-woo estaba muy confundido.

Cuando vi el humeante estofado salivaron mis papilas gustativas. Hyun-woo involuntariamente dio un fuerte gemido y tragó saliva. De repente con el tenedor en la mano Jun-woo se echó a reír. Fue Kang wook, no Hyun-woo, quien se sorprendió al verlo reir.

Kang Wook en ese momento olvidó respirar ya que vio a Jun-woo sonriendo con la boca lo suficientemente abierta como para ver su úvula. Kang-wook sabía que Jun-woo era inexpresivo a diferencia de los otros niños de su edad.

Pero pensé que no sonreía porque no quería. Así que simplemente lo dejé pasar. Tal vez justificó su sentimiento de lástima por Jun-woo de esa manera. Pero ahora me di cuenta de lo estúpido que era cuando vi a Jun-woo sonriendo con una sonrisa encantadora. No era que no quisiera sonreír es que no sabía cómo hacerlo. Algo caliente golpeó su pecho y Kang-wook mantuvo la boca cerrada.

—¿Qué es tan divertido, Jun-woo?

Hyun-woo lo había visto sonreír varias veces por lo que no se sorprendió al verlo.

—Hermano, asentí aquí y escuché un sonido de trago.

Jun-woo señaló mi cuello, asintió y fingió tragar saliva. Quizás escuchó a Hyun-woo tragando saliva. Él asintió y lo imitó tragando saliva.

—Fue porque se ve delicioso.

—Es tan gracioso. ¿Lo viste, papá?

Fue entonces cuando Hyun-woo se dio cuenta de que era la primera vez que Kang-wook veía a Jun-woo reír a carcajadas. De mala manera, Hyun-woo miró a Kang-wook con anticipación. Pensé que estaría feliz de ver a su hijo sonreír alegremente.

Hyun-woo miro a Kang-wook  y abrió mucho los ojos entreabriendo la boca. A diferencia de su rostro inexpresivo, los ojos negros de Kang-wook contenían muchas emociones. Hyun-woo creía que los ojos no mienten. Los ojos de Kang-wook mostraron sus complicadas emociones que no podía ocultar. Hyun-woo pudo leer que la mayoría de esas emociones eran arrepentimientos por Jun-woo.

—¿Por qué? Le estás dando todo lo que necesita. ¿Por qué estás tan arrepentido con Jun-woo?

No podía preguntarle directamente, pero Hyun-woo le preguntó con la mirada. Al sentir la mirada de Hyun-woo, Kang wook apartó el rostro y se levantó de su asiento. Se acercó a Jun-woo sin decir una palabra y acarició su suave cabello varias veces.

—Papá también lo vio. Jun-woo... Termina de comer con tu hermano.

—¿Qué hay de papá?

—Iré a la empresa

—Sí. Vamos.

Kang-wook salió del comedor sin siquiera mirar a Hyun-woo. Dejó su comida intacta. Hyun-woo pudo ver que había escapado. A pesar de eso se sintió aliviado cuando se fue ya que lo ponía nervioso. Hyun-woo se quedó mirando la puerta por donde se fue durante un largo rato. No pude evitar sentirme decepcionado.

★★★

Cuando le puse el pijama y lo acosté en la cama, Jun-woo palmeó el lugar a su lado.

—Hermano, acuéstate aquí también.

—Te dije que te leeré un cuento de hadas.

—Lee aquí.

—Entonces, ¿dónde dormirán Hee-ing y Doggy?

Me gustaría acostarme en la cama y abrazar a Jun-woo, pero Guk-hee le advirtió una vez. Hyun-woo esa vez también estuvo de acuerdo en que la autosuficiencia es importante para permanecer en esta casa. No podía quedarme aquí para siempre, por lo que no era bueno que Jun-woo confiara demasiado en él ya que su contrato solo era de un año. Hyun-woo puso los dos cachorros al lado de Jun-woo y abrió el libro de cuentos.

—Hoy leeré <Doggy tonto 2>

—Sí. ¿Qué le pasa al cachorro de Jinda?

Ya le había leído el primer libro que era la historia de un joven protagonista que tiene que vigilar a su perro que se come cualquier cosa, ya se lo había leído tres veces. Cada vez que abría el libro, Jun-woo hacía la misma pregunta.

—Sí, el cachorro va a tener un bebé, pero esta vez, el bebé come cualquier cosa, por lo que la perra tiene que perseguirlo todos los días.

—Vaya, es difícil. ¿No?

—Correcto.

Jun-woo abrazaba a su peluche y miro el libro de cuentos de hadas. Jun-woo, quien parecía querer levantarse para poder jugar un poco más, se durmió respirando de forma regular antes de que pasara a la tercera página. Hyun-woo se levantó y lo cubrió bien con el edredón.

—Buenas noches, Jun-woo.

Hyun-woo seguía pensando en Kang-wook mientras se dirigía a su habitación después de colocar el libro de cuentos de hadas en su lugar. Estaba confundido, pero no podía soportarlo porque le preocupaba si estaba bien.

De repente, ni siquiera entendió por qué lo estaba haciendo. Hyun-woo tenía la cabeza hecha un lio. Dejó escapar un largo suspiro y se detuvo antes de girar la manija. Recordando que apagué la luz cuando salí de mi habitación pero luz se filtraba bajo la puerta.

Hyun-woo levantó la cabeza y miró fijamente la puerta. Sintió la presencia de Kang Wook fuertemente a través de la pesada madera. Hyun-woo comenzó a temblar desde la punta de los dedos y pareció extenderse hasta su corazón.

Mi respiración no podía seguir el ritmo de los latidos de mi corazón. Un jadeo salió por sí solo. Hyun-woo enderezó la espalda y cerró los ojos por un momento. Y traté de aliviar mi tensión recordando cómo lo hacía antes de cada competencia.

—No, no es igual que con los jueces ¿Por qué estás aquí? No me digas... No.

Hyun-woo  recordó vívidamente lo que habían hecho anoche negó y se agarró la cabeza con ambas manos. Quería golpearme la cabeza contra la puerta para sacar los pensamientos de mi mente. Hyun-woo barrió bruscamente su cabello desordenado y respiró hondo.

Parecía que lo que estaba haciendo no era sensato. Hyun-woo giró la manija sin esperar a calmarse. Tan pronto como entré en la habitación como si hubiera estado mirando hacia la puerta mis ojos se encontraron con Kang-wook vestido con ropa informal. Cuando vio a Hyun-woo, miró su reloj.

—Tres minutos y 25 segundos, ¿por qué necesitaste todo ese tiempo para girar la manija?

Kang-wook negó cuando su entrepierna se calentó al ver a Hyun-woo, cuyo pequeño rostro estaba aturdido y solo parpadeaba. No importa cuánto le gustara jamás había querido comerse a nadie de pies a cabeza como ahora con Hyun-woo.

No solo era su apariencia sino también sus expresiones como sus gestos y su respiración, Hyun-wook por completo estimulaba a Kang wook. Se frenó y está tratando de superar poco a poco su lujuria pero si solo con su expresión se excita como ahora no podía evitar querer abrazar a Hyun-woo sin control.

—¿Qué?

Kang-wook chasqueó los labios porque era tan provocativo que quería tragarse incluso la voz que le devolvió la pregunta.

—¿Qué estabas haciendo parado frente a la puerta? ¿Por qué siempre preguntas '¿Qué?' con esa cabeza que entró en la Universidad K?

Hyun-woo miró con los ojos muy abiertos hacia la puerta por la que acababa de entrar.

—¿Sabías que estaba allí parado?

—Por supuesto. Podía oírte respirar. ¿Qué hay de Jun-woo?

—Está dormido. ¿Te gustaría ir a verlo?

—Luego.

Kang Wook dirigió su mirada hacia el bulto de tela extendido sobre la cama y resopló.

—¿Estás haciendo un trabajo secundario?

—No. Jun-woo me pidió que le  hiciera un uniforme de Taekwondo a sus peluches.

—¿Sabes cómo hacer eso?

—Le pedí un boceto a mi hermana porque era un poco difícil. También le pedí el material y hoy llego lo deje en la cama y fui a acostar a Jun-woo.

Debía haber limpiado. Hyun-woo se arrepintió.

—Para un hombre de negocios el prejuicio está prohibido pero el taekwondo y la costura no tienen nada en común.

Kang Wook fue hacia la cama y recogió la tela blanca y negra. Hyun-wook pensó que tenía algo que decir así que lo espero. Sin embargo, se sorprendió al ver a Kang-wook juguetear con la tela. Kang-wook no dijo nada. No podía creer que dudara. Finalmente, Kang wook miró a Hyun-woo.

—Jun-woo se rio mucho

—Normalmente se ríe mucho.

—Sí, lo sé. Pero nunca lo había visto reírse así como hoy en la cena.

—Oh espera lo siento. No puede hacer eso cuando está comiendo, ¿verdad?

Hyun-woo, pensó que lo estaba culpando por el comportamiento de Jun-woo en la mesa. Por romper los modales en la mesa, se disculpó sinceramente. Recuerdo que cuando era niño me regañaban si  jugaba o me reía a carcajadas mientras comía.

—Por supuesto que no debería hacer eso cuando está comiendo. Si mi tía los hubiera visto, ella los regañaría a ambos. Aunque primero te habría despedido.

Hyun-wook se tranquilizó al saber que Kang Wook lo dejaría pasar.

—Pero no es que no me haya gustado. No sabía que la risa de mi hijo era tan hermosa. Gracias.

Las lágrimas de Hyun-woo brotaron al escuchar lo que dijo Kang Wook. Era un padre como todos los demás.

—Pero ten cuidado delante de mi tía.

—sí.

—Seo Hyun Woo.

Al escuchar su nombre, Hyun-woo levantó la cabeza inclinada. Claramente lo había visto frente a la cama pero ahora sin darse cuenta Kang Wook estaba justo frente a él. Hyun-woo se tragó el aliento.

—¿Cómo estás?

—...Estoy bien, ¿estoy bien?

Hyun-woo, cuyo rostro estaba muy caliente, evitó la mirada de Kang-wook. Estaba tan preocupado por mi expresión que no podía mirarlo.

—¿Así que vamos a hablar de nosotros ahora?

—Nuestra historia

—A partir de hoy.

Kang Wook, quien agarró la barbilla de Hyun-woo mirándolo a los ojos sonrió con sus sensuales labios varoniles en ángulo.

—¿Qué tal un día?

—Hah... no

Quería preguntar, '¿Qué día?' pero Hyun-woo, que ya sabe lo que significa —un día— en su cabeza, no pudo continuar.

—Por qué ¿no te gustan los hombres? ¿O no te gusto yo?

—No me refiero...

Kang Wook no podría haber sido mejor. Antes de eso cuando le pidió salir, Hyun-woo olvidó por completo que le gustaban las mujeres. Aunque ese era el problema, Hyun-woo solo pensaba que él era un gran oponente.

—¿O cuál es el problema? Tómatelo con calma. Me gustan más los hombres que las mujeres. No, no soy alguien que tenga contacto con mujeres excepto con la madre biológica de Jun-woo. Pero creo que me he obsesionado contigo estos días.

—¿Quieres decir que estás enamorado?

Después de mirarlo fijamente por un momento, Kang-wook se acercó y acarició el despeinado cabello de Hyun-woo entre sus dedos.

—Al menos no te arrancaste el pelo. La parte de atrás de tu cabeza es un desastre.

—Dime. ¿Te gusto?

Kang-wook pareció divertido ante la pregunta de Hyun-woo, en la que ni siquiera pensó. Al principio, quería tener a Hyun-woo, que encajaba perfectamente con mis gustos. Después de esperar pacientemente, como si jugara un juego conmigo mismo, lo hice mío.

Además, era un hombre perfecto y comprensivo, era un virgen que ni siquiera había besado. Fue otro gusto colorear a Hyun-woo con mi propio aroma. Además de que era bueno con Jun-woo, Hyun-woo era un oponente cómodo porque conocía su lugar.

Pero no sabía que me preguntaría si me gustaba. Si digo no, '¿terminará?' Pensando en ello, Kang Wook no pudo responder fácilmente.

—Para mí, que me gustes y querer abrazarte significa lo mismo. Por eso quiero abrazarte.

Si realmente no le gustaran los hombres, habría huido a toda costa cuando Kang-wook lo sedujo. Sin embargo en él se aplicaba el dicho “el cuerpo vence a la mente”. Tenía a Kang-wook en mente cuando lo pensó. Por eso no podía soportarlo porque su respiración era sofocante y su corazón latía muy rápido al recordar lo que dijo —un día—. Por eso me preguntaba si le gustaba.

—Necesito tiempo para pensar.

—¿En serio? Entonces avísame antes de que me vaya a trabajar mañana. No quiero preocuparme por cosas inútiles en el trabajo.

—Ni siquiera es un día

—Significa que no te preocupes.

Hyun-woo cerró los ojos cuando vio que Kang-wook acercándose a él. Hyun-woo no pudo moverse ante la sensación de su lengua lamiendo sus labios. No pensé que me besaría suave.

Kang-wook no es del tipo que besa así, así que pensé que comenzaría con un doloroso beso mordiéndole la lengua. Sin embargo no fue así, su suave lengua solo empapó sus labios, se sintió decepcionado y empujó a Kang-wook.

—¿Qué sucede contigo?

—Tenemos que besarnos ya que empezamos a salir. ¿Por qué eres tan tacaño? ¿A quién lamí toda la noche?

—Te daré mi respuesta presidente antes de que te vayas a trabajar mañana por la mañana.

—Llámame senior. Si me llamas presidente una vez más te diré que digas mi nombre.

—No quiero.

Hyun-wook  imaginó la escena llamando a Kang-wook por su nombre,  se puso rojo en un instante, Kang-wook se sintió más avergonzado.

—Está bien. ¿Por qué eres tan abierto? Estoy más avergonzado al mirarte.

Kang Wook abrazó a Hyun-woo y acarició su cabello desordenado.

—Date prisa y ve a dormir. Si vas a venir a mi habitación, ven antes de que Jun-woo se despierte. Para tu información, mañana me levantaré a las 5 a.m.

Se encogió de hombros y sonrió, soltó a Hyun-woo y salió de la habitación. Hyun-woo se dejó caer en la cama cuando Kang-wook salió. Lo que pasó me dejó la mente en blanco. Aunque Kang-wook me había pedido que saliera con él, no había sentido que fuera real.

Hyun-woo dejó caer al suelo los trozos de tela esparcidos sobre la cama, se metió en la cama y se cubrió con la manta. Era como si la reina de la escuela le pidiera salir al chico invisible de la escuela y ese chico era él.

—¿Qué debo hacer? No me gusta. ¿Qué significa esto? De ninguna manera... ¿Yo era así? Así que ayer... No. No pienses en nada. ¡Vamos! Vamos a dormir.

Hyun-woo cerró los ojos y comenzó a contar mentalmente. Al mismo tiempo, casi desistí en pensar que debía poner la alarma. Esa noche, Hyun-woo, que no pudo dormir hasta altas horas de la noche, eventualmente puso la alarma en su teléfono celular.

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