6. Delaney Lou Baal

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Cuando lloro como bebé. Delaney se dio cuenta de que había reencarnado. Sin embargo, no supe desde un principio que había nacido como la hija de Dantalion. No era fácil pensar como una adulta en el cuerpo de un bebé, ya que ni siquiera podía abrir bien los ojos. Llorar era todo lo que podía hacer para que me cuidaran. Así que después de un año, dos, tres años.

Con el tiempo, me di cuenta de que el nombre de mi padre era el nombre de mi personaje favorito de una novela que había leído en mi vida pasada, pero era demasiado pronto para estar segura con solo eso. Además, me era imposible recorrer la espaciosa mansión libremente por que apenas había aprendido a caminar, por lo que no podía ir a comprobarlo directamente.

Al principio, tenía curiosidad sobre la identidad de mi padre, a quien no había visto durante estos años en la espaciosa mansión. Me sentía decepcionada ya que no se trata de tener un hijo para después abandonarlo, ¿qué diablos le pasa?

Entonces fue cuando tenía alrededor de cinco años. Cuando pude hablar y mover mi cuerpo con coordinación, Delaney quien deambulaba por la mansión, conoció a Dantalion por primera vez.

Era alto, de cabello oscuro, con unos ojos rojos brillantes. Solo entonces lo supe.

Oh, reencarné en una novela. Este Dantalion es el mismo Dantalion que era mi personaje favorito a quien solía imaginar para masturbarme.

De hecho, me decepciono cuando pensé que mi personaje favorito, Dantalion, realmente había descuidado a su hija. Pero ahora viéndolo en persona, mis pensamientos no fueron ni decepción ni emoción.

En el momento en que lo conocí mi primera impresión fue que estaba seco. Estaba seco como una planta a punto de marchitarse. Como un muñeco atrapado en un marco sin vida, obligado a moverse por otros. Estaba seco.

A pesar de que solo hicimos contacto visual durante poco tiempo, pude sentir lo sofocante que es su vida.

Dantalion era como un hombre que había sido arrojado al desierto sin agua. Su mirada cuando me miro también fue aterradora, y no vi ninguna emoción en ella.

«¿Por qué? ¿Por qué te vez sin vida?

¿Es simplemente porque este mundo es una novela?

¿Será porque eres un personaje y tienes que seguir el guion?

¿Es por eso que estás ahí parado con los ojos vacíos como un muñeco sin alma?»

No, no. Si ese fuera el caso, Dantalion no sería el único. Ni las doncellas o el mayordomo que pasaban por ahí se veían secos.

«Esto es sólo... solo era el problema de Dantalion» Por eso corrí hacia él con una sonrisa inocente, a pesar de que nunca antes lo había visto.

Me sentí rara. Era bizarro y de alguna manera extraño ver al personaje que tanto amaba, con un rostro sombrío y moviéndose secamente.

Dantalion antes del comienzo de la historia original, que ni siquiera se había descrito en la novela porque no era el personaje principal.

«¿Por qué? Tan pronto como lo vi, mi corazón latió con fuerza... pobre hombre»

Un pobre hombre que después de vivir una monótona vida sin gracia, morirá después de perder a su primer amor Lavia por que el emperador también se enamoró de ella.

Una de las cosas que Dantalion le dijo a Lavia en la novela fue eso.

—Después de conocerte, Lavia, el mundo que siempre fue oscuro y aburrido ahora parece muy brillante.

—Sin ti, no puedo respirar, siento que el mundo es estrecho, como si me ahogara....

«¿De qué color vera el mundo ahora Dantalion? Probablemente lo vea gris»

—¡Papá, papá...!

« Delaney sonrió inocentemente, llamándolo a propósito. Dantalion seguía indiferente.

No quiero que sigas el mismo camino que en la historia original. No quiero que te enamores de Lavia, tampoco que uses la magia negra, y al final tampoco quiero que apuntes tu espada contra alguien de la familia imperial. Eso es lo que quiero

¿Podre colorear tu mundo?, ni siquiera soy Lavia... sino un personaje secundario.»

No puedo garantizarlo, pero no quiero que pase por lo mismo y se quede solo como en la historia original, sin nadie a su lado.

—¡Para Líne, mi padre es mi persona favorita en el mundo!

Al menos yo no te voy a dejar solo como en la historia original, y tendrás a alguien que llorara por ti, como en el pasado.

Creo que sería muy feliz si lo supiera. Hubo un tiempo en que pensé que...

Delaney sonrió y frunció el ceño mientras miraba a Dantalion, quien la miraba.

—Papá... ¿qué dijiste?

No podía creer lo que acababa de escuchar, así que incluso le pregunté de nuevo, endureciendo la expresión.

Incluso en la descripción de la novela cuando leí sobre Dantalion, era definitivamente el epítome de un Gran Duque del Norte reticente, pesado, duro y frío, pero ¡tan dulce con su mujer!

—Te pregunté si podías chuparme el pene.

«¿Cómo diablos pasó esto?

¿Adónde se fue el Gran Duque del Norte? y quedo este perro en celo»

Delaney estaba seriamente preocupada.

«¿No esto debería haber sido mencionado en la historia original? Sobre el desenfrenado deseo sexual de Dantalion...»

Delaney, que estaba en agonía, lo miró atentamente y dijo.

—Papá, tal vez...

—¿Que?

—... ¿Estás en celo?

Ante lo que dijo, Dantalion sombrío hizo una mueca como si hubiera resultado gravemente herido.

—...en celo, no crees que eso fue demasiado.

—Supongo que ya que eres mi padre... ...eso no fue demasiado.

Delaney abrió mucho los ojos al mirar el palpítate pene erecto de Dantalion.

—... Lo hicimos tres veces durante el día.

«Pensé que hoy me podía ir a dormir temprano, pero ¿Cómo diablos puede ponerse duro de nuevo?»

—Papá, no estoy bromeando. Realmente voy a morir...

Dantalion beso a Delaney mientras ella continuaba hablando. En un instante, se quedó sin palabras y, naturalmente, abrazó a Dantalion, quien comenzó a treparse encima de ella haciendo un doloroso gemido.

—uhm mmm

La mano de papá, que ya había levantado su camisón, se deslizaba insidiosamente por la parte interna de su muslo.

—Ah, mira esto... Todos los días, solo estoy haciéndote cosas malas...

«Supongo que su cabeza solo está llena de estas cosas» Delaneye se tragó sus palabras y sintió que Dantalion se acercaba a su entrepierna.

Después de confirmarlo, Dantalion metió su mano y frotó sobre su pubis. Gracias a él, últimamente paso la mayor parte de mi tiempo teniendo sexo, día y noche.

—Lo hicimos tres veces durante el día... así que me temo que mi bebé lo pasará mal, si le pido que lo hagamos de nuevo por la noche.

Dantalion continuó, susurrando suavemente con su dulce voz.

—Por eso te pregunté si podías chuparlo.

Pero Delaney, que sabía lo que estaba pensando, no se dejó engañar. Sacudió la cabeza y dijo sonriendo.

—Solo quieres que lo chupe.

—....así es

—Pervertido.

—...Creo que eso también es verdad.

Dantalion ocupado respondiendo sinceramente, mientras frotaba su pene entre las piernas de Delaney. Delaney ligeramente tembló, sintiendo el toque del pene en su sensible coño. Entonces Dantalion entrecerró los ojos y preguntó con una sonrisa.

—...¿Puedo hacerlo?

—Justo ahora, ¿no tenías miedo de que lo pasara mal? Ugh, dijiste que estabas preocupado. Creo que estaré bien si eres amable. ...Después de todo, también debo estar en celo.

Al verla gruñendo. Dantalion sonrió felizmente. Luego agarró sus magullados pechos y gimió.

Entonces Delaney preguntó, comprobando el firme pene entre sus piernas.

—Hmm... Por lo general, a tu edad, sería comprensible que ya no pudieras ponerte duro de nuevo.

Dantalion se detuvo por lo que dijo.

«No puedo creer que me haya dicho eso, ¿a mi edad? Por supuesto, es cierto que soy mayor que Delaney, pero al oírla, ¡me sentí un anciano!»

—... Princesa, papá todavía tiene treinta y tantos.

—Está bien, ¿treinta y tantos?, ¿no vas a cumplir cuarenta pasado mañana?

Las palabras de Delaney clavaron un gran clavo en el pecho de Dantalion. Dantalion no pudo refutar su comentario. Pero fue injusto. No hay hombre en el mundo que no haya podido tener más de una erección a los 40 años.

Dantalion hizo una mueca sabiendo que solo quería burlarse de él dijo.

—...Si te meto el pene en la boca, ¿te callarás?

—Oh, oh, estoy bromeando papá, solo estoy bromeando.

—Aunque sea una broma. Lastimaste mi tierno corazón.

Era divertido verlo tan lindo mientras fingía estar herido frunciendo la boca, por lo que Delaney no dejo de sonreír.

—No sé si eres tierno, pero lo que sí sé es que eres indiscreto.

Delaney le dio unas palmaditas en la mejilla y soltó una carcajada.

—¿Cómo puedes hacer esto sin perder un día?

—Bueno, cuando estoy con mi princesa, siempre estoy caliente.

Diciendo eso, Dantalion deslizó su mano entre las piernas de Delaney con tanta naturalidad como el jugo de amor que fluía.

La gran mano empujó ligeramente hacia un lado la fina tela de su ropa interior y lentamente comenzó a cavar dentro de su coño.

—Ja... Oh, de verdad...

—¿Por qué, no debería? ¿Estás seguro de que quieres hacerlo?

Dantalion, sorprendido por el murmullo de Delaney, dejó de actuar de inmediato y preguntó.

—Oh... Lo siento, bebé. Si realmente no quieres hacerlo.

Dantalion se había comportado así desde la coercitiva primera noche cuando no escucho a Delaney y fue despiadado. Todo el tiempo que me hacía montar su pene actuaba como un semental desesperado, pero incluso estando así, si Delaney mostraba signos de dolor o gemía como si lo sintiera se detenía y le preguntaba si quería continuar.

—¿Te gustaría bañarte e irte a dormir temprano? ¿Qué tal si nos duchamos juntos? Papa te ayudara a bañarte.

—No, no. Estoy bien quiero hacerlo,

—Eso es bueno. Entonces ¿Qué tienes? ¿Te sientes incomoda?

Delaney vaciló por un momento y evitó persistente mirada de Dantalion.

Hubo un breve silencio, y ella murmuró tan bajo como pudo.

—... Odio hacerlo de espaldas.

Entonces Dantalion parpadeó por un momento con cara de tonto.

—... no puedo ver la cara de papá.

Al escucharla, se rio a carcajadas feliz. Cuando la penetraba por detrás como un animal, me gustaba ver como sus pechos colgaban y se sacudían, por lo que solíamos hacerlo así a menudo, pero a Delaney no parecía gustarle.

—Sí, no es en esta posición. ¿Podemos hacerlo entonces?

—...despacio.

—Sí, despacio.

—Realmente tienes que ser amable.

—Sí, muy, muy despacio.

Dantalion, le dio un beso tronado y abrió sus labios entrelazados y encontró el bulto de carne escondido entre ellos. Luego frotó suavemente el clítoris con las yemas de los dedos.

—Ja ja.

Delaney se estremeció ante el placer que surgió del lugar que tocó. Como le gustó su reacción, Dantalion aceleró el ritmo de sus gestos con las manos. A través de su hueco y labios, los dedos de su padre se movían afanosamente de un lado a otro. Mientras deambulaba alrededor del clítoris, que había comenzado a erizarse, el agujero amorosamente húmedo seguía goteando líquido de amor. Dantalion agarró su pene y susurró mientras presionaba la punta en su coño.

—...Te amo princesa.

Su bonita voz en tono bajo le provoco una sensación de cosquilleo al estar llena de dulce afecto. Siempre ha sido amable y actúa como si solo quisiera a su dulce hija. Delaney tampoco dudaba de los sentimientos de Dantalion.

«Sin embargo.... Según la historia original, no faltaba mucho para que Dantalion y Lavia se conozcan. Realmente... ¿Mi papá seguirá amándome incluso cuando conozca a Lavia? ¿Podemos desviarnos del flujo establecido de la historia original?»

Delyne se mordió el labio con inquietud. Estaba tratando de que no le importara, pero no pudo evitar seguir pensando en eso. Según la historia original, Dantalion y Lavia se conocen por primera vez en una calle comercial. Pero recientemente, Dantalion ha estado en la mansión con Delyne, por lo que, naturalmente, ni siquiera ha salido ni mucho menos ido a la calle comercial.

—Entonces sería imposible que se conocieran por accidente en la calle comercial.

Estaba nerviosa, porque ni siquiera sabía cuándo o dónde Dantalion se encontraría con ella.

—Si mi papá conoce a la princesa Lavia y se enamora de ella a primera vista como en la historia original... entonces ¿qué me pasara?

Por supuesto, preferirá tener a la Princesa Lavia como anfitriona en lugar de a mí, una mujer con la que ni siquiera puede casarse.

Fue amargo pensar en eso. Además, no sería un buen resultado ya que al final se enfrentaría con el emperador como en la historia original. Dantalion seria derrotado y tendría una vida corta. Al contrario de ella, mientras estaba confundida por varios pensamientos, Dantalion estaba ocupado penetrándola entre las piernas, envistiéndola con su grueso pene.

—Jaja... Line...

Sin embargo, Delaney, que normalmente habría abrazado su cuello de buena gana, no respondió. Dantalion, sintiendo una extraña sensación, la miró en lugar de seguir moviéndose.

—Bebé.

—......

—¿Bebé?

—Oh

Delaney, que recobró el sentido tarde, soltó un gemido aturdida.

—¿En qué estás pensando?

—Lo siento, espera un minuto... Por favor...

«Estas pensando en otra cosa cuando estas teniendo sexo conmigo. Dantalion frunció el ceño ligeramente»

—¿Un minuto?

Antes de que pudiera expresar su decepción, Delaney lo abrazo. Dantalion inclinó ligeramente la cabeza, sintiendo como temblaba su pequeño cuerpo.

—¿Qué le pasa a mi princesa?

No era propio de ella abrazarme como si fuera una niña.

—...Papá.

—Sí, cariño.

Hubo un breve silencio entre los dos. Dantalion hizo contacto visual con ella, tocándole la mejilla intentando calmarla. Los brillantes ojos rojos intercambiaron miradas, mirándose directamente el uno al otro.

Y fue Delaney quien rompió el silencio.

—....¿Tu de verdad me amas?

Le pregunto con un tono algo lúgubre y melancólica.

«¿Por qué de repente estás tan asustada?»

Confundido, Dantalion respondió sin dudarlo.

—Por supuesto.

—Pero y si... ¿Y si mi papá se enamora de otra linda princesa a primera vista?

—...... ¿Qué? ¿Que si me enamoro de otra princesa a primera vista?

Preguntó desconcertado. Delaney asintió en silencio y lo miró furtivamente. Entonces Dantalion se rio.

—Eso es ridículo.

—Pero tú no sabes nada acerca de esa persona.

—¿Es eso lo que te preocupaba tanto?

Susurró, colocando cuidadosamente el cabello de Delaney detrás de sus orejas.

—Line, no puedo vivir sin ti.

—Pero...

Delaney vaciló y se humedeció los labios.

—Pero la relación entre mi papá y yo es...

Es una relación irrazonable que no se puede presentar en ninguna parte del mundo. Es un sentimiento que solo nosotros debíamos conocer, ya que no podemos ser bendecidos.

Dantalion golpeó su frente cuando una luz negativa brilló en sus ojos.

—Pero no lo es.

Entonces los ojos de Delaney se abrieron de par en par con sus siguientes palabras.

—Yo... no puedo respirar sin ti, siento que el mundo es estrecho, como si me ahogara... Line, eres mi mundo.

Estas son las palabras con las que Dantalion le confesó sus sentimientos a Lavia en la historia original. Solo entonces Delaney notó que la bandera que debía haber sido dirigida a Lavia estaba dirigida a ella.

—El mundo, que siempre fue oscuro y aburrido, ahora se ve muy brillante.

Mientras decía eso, Dantalion la besó suavemente por toda la cara. Una serie de ligeros besos fueron derramados en su rostro como una lluvia de verano.

—El sentimiento de ser amado y poder dar amor fueron cosas que aprendí después de conocer a Delaney. Así que no te preocupes.

Dantalion sabía que su vida había cambiado rápidamente y que no sería una exageración decir que su vida estaba dividida en antes y después de conocerla.

—Si estás ansiosa porque no puedes atarme bajo el sistema del matrimonio, haré todo lo que pueda para que estés menos ansiosa.

Sintiendo como sacaba lentamente el pene para después meterlo profundamente.

—Cuando estés preocupada por algo así de nuevo, por lo menos bésame.

Delaney se estremeció moviendo la cadera ante el vívido movimiento que sentía dentro de ella. Junto con eso, su coño apretó el pene de Dantalion.

—Te amo, Delaney

Ante el suave susurro, Delaney cerró los ojos y volvió a besarlo.

—Yo también te amo.

Sus lenguas se entrelazaron con los dientes ligeramente abiertos el uno del otro, y mezclaron su saliva. La respiración de los dos se volvió más áspera que antes. Delaney pensó, apretando su mejilla con su pequeña mano.

«Papá no lo sabe. Pero desde hace mucho tiempo, cuando mi papá aun no me conocía. Mi papá era lo más preciado para mí»

—.... más de lo que papá me ama.

Dantalion frunció ligeramente el ceño ante su pequeño murmullo.

—Bien.

—Eh...

—No me parece.

Dantalion, que juguetonamente le mordió los labios, movío su pene poco a poco y susurro.

—... Bebe, tú no sabes.

El calor fluía entre los cuerpos unidos.

—Cuánto impacto tiene cada pequeño acto tuyo en mí.

Delaney parpadeo ante las significativas palabras. Dantalion no tenía intención de contarle nada más, apartó la mirada de sus ojos curiosos y sonrió.

—...Te amo.

Delaney lo besó en lugar de responder.

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